miércoles, 27 de enero de 2016

Josefina.


Declaración de Intenciones lleva tu nombre.

¿Me estas escuchando? Te debieron hacer mucho daño en el pasado para asesinar de esa manera tu propio romanticismo. Deja el blíster con Orfidal donde estaba. No hay fármaco en el mundo capaz de anestesiar las ganas de querer a un ser humano. Que el corazón, amiga, es un músculo involuntario. Late a placer, a excepción del resto de músculos que están sometidos a nuestra voluntad. Como la sonrisa que te delata. Esa curva. Ese músculo, que no tiene dudas, que aparece de la nada para sedar, esta vez sí, esas ganas fingidas de no ser correspondida. Deja de hacerte llamar alma libre.

Las almas libres amamos.

Y tú de eso, sabes bien poco.

miércoles, 13 de enero de 2016

Alba.


Lo fuerte que fui se mide en los segundo que le gané a tu hija para coger el teléfono, para ser yo quién escuchara el “ya está”. Y después, silencio. Lo fuerte que soy se mide en los nudos que tejes alrededor de mi garganta y yo consigo desatar sin que se me nuble la vista, al recordarlo. Lo vulnerable que soy, desde entonces, se mide en las veces que me repito que volveremos a vernos y me lo creo.

Qué más dará un día más que un día menos. 
Hoy hace 364 días que eres intocable y mañana hará año. 
Y las pocas ganas que tengo de celebrar este aniversario qué.

Hay velas que deberían encenderse de nuevo.
Y años que no deberían cumplirse.